María J. S.
5/5
ENCANTADA con el servicio de ATENCIÓN AL CLIENTE de Loring.
Me acaba de atender PEDRO PASTOR, y no puedo haber quedado más contenta. Tanto por su sincero interés en ayudarme, como por su amabilidad, talante comunitativo y paciencia.
Esta mañana se me ha roto una de las patillas de mis gafas Loring (que llevaban conmigo desde 2017), y por problemas de salud, no me es posible salir a la calle para comprar otras. Así que, ya me veía sin gafas de leer para todo el puente de diciembre, dado que, hasta el próximo martes, no vendrá alguien que pueda ir a una farmacia a encargarlas, o a comprarlas.
Menos mal que se cruzó en mi camino Pedro, vía telefónica, tan motivado en ayudarme (incluso cuando me lié con la tienda online). Las necesitaba con urgencia, y con la misma graduación y el mismo modelo, porque me encantan las que tengo. Mañana mismo las recibiré.
Ojala que la empresa tenga en cuenta -poniendo en valor y cuidando-, a trabajadores con esta actitud, pues, en definitiva, para un cliente, ellos son la cara de la empresa: la impresión que nos dejan ellos, es la impresión que nos llevamos de la empresa.
En tiempos en que las empresas menosprecian al cliente poniéndole como atención telefónica a una máquina para "interactuar" con él/ella (lo que genera nula satisfacción, mala interpretación de la máquina de nuestras necesidades reales, y crispación), interactuar con una persona desde el primer momento, ha sido maravilloso, y si, encima, el servicio es tan excelente, es que hasta emociona, la verdad. Que siga así, por favor.
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ACTUALIZACIÓN (06/05/2022):
Tengo que decir que sigue siendo MARAVILLOSO el servicio de ATENCIÓN AL CLIENTE que tiene esta empresa. Resulta que, hace unos días tuve que volverles a contactar por un problema surgido con las gafas que compré en diciembre en su tienda online (seguramente porque se trata de un modelo antiguo, dado que tiene unos años). Pedí hablar de nuevo con PEDRO PASTOR, dado que ya conocía mi caso de mi contacto con él en diciembre y yo recordaba que había sido increiblemente amable y receptivo conmigo. Bueno, pues sigue igual de resolutivo y amable (no es que la otra vez le pillara en un "buen día"). Me dijo que no me preocupara, que como estaban en garantía me enviarían otras sin cargo. Su trato humano fue excelente de nuevo. Y no sólo eso, cuando recibí el paquete me encontré con la agradable sorpresa de que, junto a las gafas, venían un pañito limpiagafas y un llavero que tiene dos mini destornilladores para las gafas.
Este tipo de personas amables, resolutivas y detallistas son las que, junto a la relación calidad/precio de los productos, fidelizan a un cliente con la empresa, como ha sido mi caso. ¡Seguid así, por favor!.
